Aprendizaje para toda la vida: la UBA acompaña a mayores de 45 a través de cursos en línea
La Universidad de Buenos Aires (UBA), reconocida por su excelencia desde 1821 , ha desplegado una oferta robusta de formación continua, tanto virtual como presencial, a través de plataformas como Cursos UBA, Capacitarte y el programa UPAMI-SEUBE para adultos mayores

Este artículo describe cómo la Universidad de Buenos Aires (UBA) promueve el aprendizaje permanente entre los argentinos mayores, especialmente aquellos de 45 años o más, a través de sus cursos en línea diseñados para ellos. El artículo destaca los estilos de aprendizaje, el contenido, las ventajas y las etapas específicas de este grupo de edad.
🎯¿Por qué es importante aprender después de los 45?
✅ Desarrollo profesional y seguridad laboral
A esa edad, muchas personas buscan actualizarse: aprender herramientas digitales (Excel, marketing digital), técnicas de gestión (recursos humanos, community manager), o administrar sus finanzas personales .
✅ Estimulación cognitiva y emocional
Estudiar estimula la memoria, mejora el bienestar y promueve la interacción social, una base clave para el bienestar en la madurez .
✅ Sentido de pertenencia y comunidad
Participar en cursos crea redes de apoyo y conexión con personas de distintas edades, fortaleciendo la cohesión intergeneracional.
📚Plataformas y modalidades de cursos
Cursos UBA – online y presenciales:
1.Ofrecen más de una docena de opciones en su modalidad virtual, incluyendo:
Asistente contable, Excel, RRHH, Community manager, Marketing digital, entre otros .
Cursos de idiomas (inglés, francés, italiano, portugués) en distintos niveles .
Modalidad sincrónica por plataformas como Zoom/Meet (8 a 12 clases) y certificación de participación .
2.Capacitarte – cursos intensivos y presenciales:
Esta iniciativa complementaria, surgida del Centro de Estudiantes (FCE-UBA), ofrece formación en áreas como:
Nutrición, decoración, marketing, liderazgo, idiomas, programación .
🧭Contenidos recomendados para quienes tienen más de 45 años
45–54 años
Excel básico a avanzado: mejora la productividad laboral
Community manager, marketing digital: planificar y gestionar redes .
Asistente contable, liquidación de sueldos: útil para profesionales y microemprendedores .
55–64 años
Idiomas: inglés, italiano, francés, portugués — con enfoque comunicacional .
Oratoria y organización de eventos: mejora de habilidades relacionales y sociales .
Cine, literatura, historia: cursos descritos en UPAMI con enfoque filosófico y humanista .
65 años en adelante
Filosofía, historia del arte, cine: estimulación cognitiva y disfrute intelectual .
Salud y bienestar: nutrición, uso moderado de tecnología y alfabetización digital (Capacitarte) .
🧭🗓️ Modalidades adaptadas al adulto maduro
🕒 Flexibilidad horaria
Cursos con clases en línea via Zoom y grabaciones, accesibles a cualquier hora .
👥 Interacción social
Uso de foros, grupos de trabajo, intercambios de experiencias, lo que favorece vínculos entre participantes de distintas edades.
🧾 Certificación y respaldo
Los cursos ofrecen certificados de participación o aprobación (según plataforma), útiles para el currículum, la satisfacción personal o para voluntariados.
📈 Impacto y beneficios reales
Motivación y rutina: fortalecimiento del estado de ánimo a través del aprendizaje continuo.
Inclusión digital: acceso a herramientas, Zoom, plataformas educativas, chats grupales.
Vida social activa: interacción con nuevas generaciones y con pares.
Nuevas identidades: algunos se vuelven mentores, acompañantes en proyectos comunitarios.
Mayor bienestar cognitivo: estimulación intelectual que retrasa el declive natural del envejecimiento.
✨ Conclusión
Para aquellos que tienen 45 años o más, la Universidad de Buenos Aires ofrece una ruta de aprendizaje coherente y enriquecedora que se adapta a sus tiempos, intereses y necesidades. Con cursos técnicos, humanísticos, sociales, y de salud, la UBA no sólo promueve competencias útiles, sino también satisfacción personal, interacción social y bienestar general.
Se trata de una propuesta sólida y cercana, que confirma que estudiar no tiene edad, y que aprender puede mejorar nuestras vidas en la mejor etapa: la madurez.